La Ruta del Hundido de Armallones es una de las más espectaculares del Parque Natural del Alto Tajo, ideal para los amantes del senderismo y la naturaleza virgen. Esta ruta se caracteriza por su recorrido circular que atraviesa el famoso Hundido de Armallones, un impresionante conjunto de enormes piedras y riscos que se elevan sobre el río Tajo, ofreciendo vistas dramáticas y únicas.
Características de la Ruta:
- Distancia: Aproximadamente 14 km.
- Duración: 4-5 horas dependiendo del ritmo y las paradas.
- Dificultad: Media. Aunque no tiene grandes desniveles, el terreno es irregular y requiere atención.
- Desnivel: Alrededor de 240 metros.
- Temática: Geomorfología, flora y fauna.
- Fauna observable: Durante el recorrido es posible ver diversas aves rapaces como águilas reales, buitres leonados y halcones peregrinos. Además, si tienes suerte, podrías avistar cabras montesas en las zonas más altas.
- Flora: El recorrido está flanqueado por pinos silvestres y bosques ribereños que adornan las orillas del Tajo, creando un entorno fresco y sombreado en los tramos más cercanos al agua.
Ruta y puntos destacados:
El trayecto comienza en el pueblo de Armallones y sigue por caminos bien señalizados que llevan a los excursionistas hacia el Hundido. A lo largo del camino, se pueden contemplar los acantilados que forman parte del cañón del río Tajo, lo que convierte el recorrido en un espectáculo natural impresionante. Uno de los puntos más destacados es el mirador desde donde se tiene una vista privilegiada del cañón, con el río serpenteando entre los gigantescos riscos.
Además de las formaciones geológicas, el entorno natural del Hundido es rico en biodiversidad. Los pastizales y los pinos son el hogar de diversas especies de fauna, incluyendo ciervos, jabalíes y una variada población de aves forestales como herrerillos, carboneros y arrendajos.
Recomendaciones:
- Equipo: Es recomendable llevar calzado adecuado para terrenos rocosos, agua y algo de comida, ya que no hay fuentes a lo largo de la ruta.
- Época del año: Aunque se puede hacer en cualquier época del año, es especialmente recomendable durante la primavera y el otoño, cuando las temperaturas son más suaves y el paisaje se llena de colores vibrantes.
Esta ruta no solo ofrece una inmersión en la naturaleza más salvaje del Alto Tajo, sino que también permite a los visitantes conectarse con la tranquilidad y la belleza de este paisaje tan característico.